Pokémon: The Origin es una especie de homenaje a esos dos primeros
juegos, Pokémon Rojo y Pokémon Verde
Azul, que hicieron historia en la GameBoy original y que han hecho que, a
día de hoy, Pokémon se convierta en la segunda saga más vendida del mundo del
videojuego. Tan solo por detrás de Mario.
Lo primero que llama la atención es el enfoque nostálgico de
la producción que, nada más empezar el primer capítulo, nos sorprende con un
menú en blanco y negro idéntico al que nos propuso GameFreak el primer día que
empezamos nuestra primera aventura Pokémon. Le damos a comenzar.
A partir de aquí, lo típico. El Profesor Oak nos introduce en el mundo Pokémon y el protagonista,
llamado Rojo se dirige a su laboratorio para escoger entre los tres Pokémon
iniciales. El elegido por Rojo, como no, es el simpático Charmander. Por su lado, Verde escoge a Squirtle pensando en el lado más estratégico y Bulbasaur vuelve a caer en el olvido.
La historia que nos proponen en esta adaptación, es la de
cumplir el sueño del viejo Profesor Oak y completar la Pokédex. Una especie de
enciclopedia que recoge los datos de todos los animales capturados. Lo que
llevará a Rojo a descubrir el comportamiento de los Pokémon, la forma en que
luchan y ganan experiencia y finalmente a ganar su primera medalla como
entrenador.
Hay que decir que en general, el anime se mantiene muy fiel
al juego y por lo que hemos podido ver en el primer capítulo solo adorna la
historia con alguna que otra licencia dramática para otorgarle algo más de
sentido al hilo conductor. Si bien es verdad que está bastante bien recreado y
que reúne varios guiños al pasado, no nos salvaremos de algunos tópicos
bastante infantiles. Debes amar a los Pokémon, tenéis que luchar como si
fuerais uno, etc, etc, etc.
Además se echa en falta algunos momentos míticos cómo el del anciano que te enseña a capturar Pokémon, el paso por el Bosque Verde o la
primera lucha nada más recibir a Charmander. La cual tendrá lugar más tarde en
un bosque indeterminado.
Por su lado, los protagonistas están fielmente recreados y
nos recordarán a sus homónimos del juego portátil. Uno dispuesto a todo por
ganar, algo prepotente y que va de enteradillo y el otro todo lo contrario,
dispuesto a aprender, noble y con sentido de la responsabilidad. Su rivalidad
les hará ser mejores, pero parece que Verde siempre va un paso por delante, al
menos por el momento.
Otra cosa son los secundarios. Por ejemplo Brock, el líder
del primer gimnasio. Si bien en su batalla contra Rojo usará los mismos Pokémon
que usó contra nosotros en el cartucho,
su predisposición a ganar parece ser mucho más baja. Además parece
querer enseñar al chico algo de sabiduría Pokémon cuando a nosotros en el juego
no nos hizo ni caso y las pasamos canutas para vencerle, sobre todo si nuestra
elección fue Charmander.
Por lo visto hasta el momento, el anime es una grata
sorpresa para todos aquellos fans de Pokémon, pero sobre todo para aquella
generación que disfrutó de las dos primeras entregas. Aquellos para los que los
150 primeros siempre fueron los mejores.
Por otro lado señalo
que no es necesario que seas amigo de las series animadas o de los dibujos para
niños, mucho menos de la serie de Pokémon original para disfrutar de esta. El
contar solo con cuatro capítulos de 20 minutos nos garantiza que por muy mala
que consiga ser nunca será peor que la historia de Ash.
Nota: 7/10
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