Divertido episodio de transición
nos han dejado esta semana 'How I Met Your Mother'. El más divertido en lo
que llevamos de temporada y un capítulo con sabor a vieja escuela.
Aunque no se ha avanzado nada en
las líneas generales de la trama, las sensaciones tras este capítulo no han podido
ser mejores. Y gran parte de culpa, por no decir toda, la tiene el malentendido
protagonizado por Marshall y Ted entorno a los regalos de boda. Aunque es una
trama sin trascendencia alguna, la forma como ha sido llevada, a base de ingeniosos
y recurrentes flashbacks, nos ha recordado a los mejores tiempos de la serie.
Sin embargo, no todo ha sido
bueno. Los guionistas siguen empeñados en demostrar lo mucho que se quieren
Robin y Barney y lo perfectos que son el uno para el otro, dándonos semana tras
semana escenas empalagosas y pesadas que flaco favor le hacen a ninguno de los
personajes.
Y mientras, en medio de todo y de
todos: Lily. Ya decíamos la semana pasada que Lily se ha convertido en el mejor
personaje de la presente temporada, y sigue demostrándolo. Verla disfrazada de Michael Cera en Juno o saliendo de su escondite al sonarle el teléfono móvil son solo
algunos ejemplos que demuestran que el personaje está más en forma que nunca.
¿Habéis llegado a ver a la
calabaza putilla en la fiesta de Halloween? ¡Qué cerca estuvo de Ted!... ¡Esta noche
más!
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